COLUMNA DE OPINIÓN

LA LISTA DE SCHINDLER A LA PERUANA

La reducción del Estado fue algo muy necesario, ya que el sector público estaba quebrado y sobredimensionado en el año 1990 y era urgente iniciar el proceso de modernización. En este contexto, se optó por pagar el alto costo que significó darles buenos incentivos a los que se retiraron. Hoy existen serios cuestionamientos sobre el procedimiento para determinar a los beneficiarios de la “Cuarta Lista de cesados” y se han dado denuncias sobre el otorgamiento de este beneficio a extrabajadores que renunciaron a sus puestos de trabajo recibiendo los correpondientes incentivos y que por ley no debería corresponderles derecho alguno.El largo proceso para determinar a los beneficiados, se presta a ser utilizado por el gobierno de turno para favorecer a personas allegadas a él, teniendo en cuenta que no se explica o fundamenta de manera clara las razones por las cuales alguien es incluido o excluido de la lista. Las personas beneficiadas en esta nueva lista, son todo, menos trabajadores despedidos sin beneficio alguno que debieran ser compensados. Entonces ¿es necesario cumplir dos veces con ellos a costa del dinero de los peruanos? es inaceptable que esto se convierta en un perjuicio contra el Estado. Asimismo, se habla del cobro de cupos para poder ser incluidos dentro de éste listado, hecho que tendrá que investigarse a profundidad. Con esta medida se esperaba que la mayoria de beneficiarios optace por la compensación económica, o la jubilación anticipada, pues luego de tantos años, los trabajadores han seguido otros caminos laborales o simplemente ya no se encuentran en edad para continuar laborando. Sin embargo, según cifras extraoficiales, muchos de los beneficiarios estan optando por la reincorporación, situación que no debería darse por las razones siguientes: las personas ya están trabajando, ya fueron racionalizadas y se crearían 36 000 puestos vegetativos en el Estado. El 01 de octubre del 2004, cuando Alejandro Toledo era presidente de la República se expidió la Resolución Suprema Nº 034-2004-TR, mediante la cual se “Aprueba la última lista de ex trabajadores que deben ser inscritos en el Registro Nacional de Trabajadores Cesados Irregularmente”, nos referimos a la “tercera lista” y pese a que en el propio nombre de la norma se estableció que era la última, hoy existe la “cuarta lista” con más de siete mil beneficiados y con una serie cuestionamientos por parte de las centrales de trabajadores, lo que nos lleva a preguntarnos si una vez más el Congreso de la Republica expedirá una nueva Ley para posibilitar una “quinta lista” y complacer electoralmente a los interesados. "Esperemos que no, porque los paganos serán los ciudadanos de a pie con sus impuestos". Por el bien de nuestro país, y por un tema de necesidad pública, es necesario que se concluya definitivamente este mecanismo de clientelismo político, a costa de los recursos del Estado ya que se trata del dinero de todos los peruanos. No debemos engordar más la planilla del Estado.
WALTER MENCHOLA VASQUEZ

CONGRESISTA DE LA REPUBLICA